Si no tenemos ninguna lesión que nos lo impida, las flexiones de brazos son de los mejores ejercicios que podemos realizar, sin importar nuestro nivel de entrenamiento, dado que este ejercicio de realización simple pero de buena intensidad trabajan con nuestro propio peso varios músculos del cuerpo, tonificando y marcando la mayor parte del tren superior. La mayoría de los atletas y entrenadores solo asocian las flexiones con el pecho y el tríceps, pero son un gran ejercicio para ganar fuerza en la espalda y la propiocepción de hombro, así como para inculcar patrones de estabilidad adecuada en nuestro tronco. Aprovechar los beneficios de las flexiones significa centrarse en ejecutar la técnica correcta en primer lugar.
Al realizar flexiones de brazos en el suelo solicitamos principalmente el pectoral, pudiendo incidir más en el haz clavicular del pectoral mayor si elevamos los pies o trabajar en mayor medida la parte inferior del pectoral mayor si elevamos el torso.
Asimismo, con este movimiento requerimos del trabajo del tríceps que colabora en la extensión de los brazos para elevar el torso. Podemos incidir más en este músculo si colocamos las manos más cerca del cuerpo, es decir, con una apertura más estrecha.
De manera secundaria son trabajados el deltoides anterior que fija el hombro, los bíceps que colaboran con la flexión de brazos y el abdomen que colabora manteniendo la postura adecuada durante el ejercicio.
¿Por qué son tan buenas las flexiones?
Escápula
Durante las flexiones, permitimos a la escapula hacer su rango completo de movimiento, este movimiento no es posible cuando trabajamos el press de banca con barra o mancuernas.Y no trabajar el movimiento completo, no es una de las mejores cosas que podemos hacer si queremos ganar salud escapular.
Serrato anterior
Uno de los mayores beneficios de las flexiones correctas es la activación del serrato anterior en la parte superior del movimiento. Lo que deriva en la pregunta, ¿por qué es importante esto?; el serrato anterior es un músculo normalmente inactivo que es extremadamente importante para cualquier atleta que implique la parte superior del cuerpo en sus movimientos (como los jugadores de baloncesto). Una disfunción en el serrato puede causar problemas en la escápula, creando inestabilidad en una zona donde queremos tener estabilidad en todo momento. Posiblemente la función más importante del serrato es la asistencia que proporciona en la rotación hacia arriba. El serrato trabaja en combinación con el trapecio superior e inferior para completar este movimiento. Realizar flexiones correctamente con la extensión y prolongación completa, activará el serrato. Si queremos implicarlo aún más, solo tenemos que elevar los pies unos 30 cm (apoyados en un banco) al realizar le movimiento.
Estabilidad en el tronco
Este es otro de los grandes beneficios que nos proporcionan las flexiones. La espalda es una zona en la que nos interesa conseguir siempre la máxima estabilidad posible. La flexibilidad lumbar y dolor de espalda baja tienen una correlación negativa. Cuanto más movimiento tenemos en la columna lumbar, más susceptible es nuestra espalda al dolor y el daño. Según varios estudios realizados, las flexiones tienen mayor activación muscular en los oblicuos que un puente lateral isométrico (ejercicio abdominal). Son ideales para el pecho, hombros y espalda superior, pero además activan los músculos estabilizadores del tronco tanto como cualquier ejercicio abdominal isométrico.
Hombro
Las flexiones son un gran ejercicio de cadena cerrada que nos ayuda a desarrollar la estabilización, así como la propiocepción en la cintura escapular. Utilizar una superficie inestable para hacerlas (un balón medicinal) crea un aumento en la activación del estabilizador.
Una vez vistos los beneficios y a pesar de ser uno de los ejercicios más habituales, muchos de nosotros las sigue realizando de manera inadecuada sin reparar en los errores. Por ello os voy a dar la progresión correcta para llevarlas a cabo sin peligro y con la mayor efectividad posible.
Podemos empezar realizando flexiones en la pared, cuando vayamos ganando fuerza ir progresando a posiciones más horizontales, primero apoyadando las manos sobre un banco, silla o escaleras, posteriormente solo apoyar rodillas y finalizando con la flexión de brazos básica. Posteriormente y para aumentar intensidad podemos colocar nuestros piés en lugares elevados.
Finalmente os dejo un vídeo en el que podréis ver muchas más variantes de las flexiones, y deciros que se puede conseguir, pero con esfuerzo y entrenamiento, algunas no son nada fáciles.
Fuentes: http://www.sportfactor.es/blog/2010/12/lo-que-nunca-te-contaron-sobre-las-flexiones/